Las Ruinas de San Ignacio son el mudo testigo de los años entre 1609 y 1768, cuando en las áreas fronterizas del actual Brasil, Paraguay, Uruguay y Argentina se vivió una de las experiencias civilizadoras inéditas en el mundo entero. 30 pueblos que integraron la llamada Provincia Jesuítica, crecieron hasta alcanzar un desarrollo tecnológico y social inesperado por la corona española, situación que desencadenó la expulsión de los Jesuitas de América. En San Ignacio Mini se puede contemplar esta obra sin precedentes, su riqueza arqueológica, el trazado de las misiones, museos de interpretación y esculturas. San Ignacio posee el conjunto arquitectónico barroco misionero mejor conservado del Circuito Internacional de las Misiones. Desde aquí el visitante podrá comenzar su recorrido al pasado, remontándose a mas 3 siglos de historia. La Misión Jesuítica - Guaraní de San Ignacio Mini fué declarada por la UNESCO Patrimonio Cultural de la Humanidad en el año 1983