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Acabo de volver de Puerto Iguazú. La ultima vez que visité las cataratas había parado en Foz, pero ahora no tenía sentido...preferí quedarme en mi país.Es la tercera vez que visito las cataratas, y sé que volveré, tal vez por ser tan nuestras veo que no se les da la importancia que tienen. Tantos extranjeros quedan pasmados al verlas...! y sin embargo, tantos argentinos que tienen la posibilidad de visitarlas y no han ido.Me aloje en La Cabaña, cerca del Hito 3 Fronteras. A favor tenía que el omnibus a cataratas pasa frente a la puerta... también debo destacar la hermosa pileta, y por supuesto la atención de Dorys y Guillermina, que trabajan ahí. En cambio, los dueños no me parecieron tan agradables. Son hermano y hermana. El te informa bastante, y es bastante agradable, pero a la hermana no sé si le faltaban un par de jugadores, si es media tonta, o qué: hacía observaciones extrañas, no nos facilitó el teléfono para una llamada por una excursión diciendo que era a un celular y por lo tanto carísima, la verdad por ella no volvería a ese sitio, por lo demás, todo bien.Algo más, enero es decididamente mala elección para ir a cataratas... sufrimos hasta 43 grados...Gracias a Via Bariloche por su servicio ejecutivo, que no es mucho más caro, pero hace que el viaje sea un deleite.