Con una atractiva geografía, el Parque Nacional Queulat posee alturas de dos mil metros y una extensión de 150 mil hectáreas aproximadas, además de ser un refugio para especies de fauna y flora nativas. Sus atracciones naturales se combinan con las actividades turísticas, en un escenario en donde destacan ventisqueros (siendo el Colgante el más importante, ubicado a 7800 metros de la orilla del mar), portezuelos, saltos, fiordos, lagos, lagunas y caminos peatonales. La vegetación silvestre también es sugerente, con una flora que se constituye por coigues, tepas, nalcas y tepús. La fauna también es diversa, y comprende carpinteros negro, caiquenes, cisnes de cuello negro, chucaos, coipos guiñas y pudúes