La Catedral Metropolitana Nossa Senhora Aparecida, más conocida como la Catedral de Brasilia, fue diseñada por el arquitecto Oscar Niemeyer e inaugurada el 12 de Septiembre de 1958. Está compuesta por dieciséis columnas de hormigón, con un peso total de 90 toneladas. En el exterior, se pueden apreciar esculturas evangelistas, mientras que adentro del edificio, se exhiben ángeles, todas ellas obras de Alfredo Ceschiatti. También posee cuatro campanas que fueron donadas por ciudadanos españoles que vivían en Brasilia en el año 1968.