La zona muestra vestigios de poblamiento antiguo, cuya ocupación va desde el siglo V a. C hasta el siglo XVIII d. C. En la parte alta de la vereda Buga existen también vestigios de infraestructura en piedra como caminos, de estos solo se conoce uno al que le llaman “Camino Prehispánico”, los otros están cubiertos por la maleza, y petroglifos, constituidos por figuras espirales, geométricas, fitomorfas y antropomorfas.